jueves, 4 de febrero de 2016

EUGENIO EULALIO PALAFOX PORTOCARRERO


EUGENIO EULALIO PALAFOX PORTOCARRERO PALAFOX Y ZÚÑIGA
VII CONDE DE MONTIJO



IMAGEN: File:Francisco de Goya - Un Oficial, c.1804 (Frick Collection).jpg
I Un Oficial (Conde de Teba?)
Eugenio Eulalio de Palafox y Portocarrero (Conde de Montijo).
Francisco de Goya 1804.


En el libro de Vicente Navarro del Castillo: MONTIJO. APUNTES DE UNA VILLA CONDAL, en la pág. 43, podemos leer:
“Se dice de este conde, que nace en 1773, que era masón y que tomó parte activa en el motín de Aranjuez, que pudo costar la vida a Godoy. Era conocido por el pueblo con el mote de “Tío Pedro”.
Nacido en Madrid el 12 de febrero de 1773.Era hijo de Felipe de Palafox y Croix D´Arbés, Teniente General de los reales ejércitos  y de María Francisca Portocarrero, VI Condesa de Montijo. (1)
En vida de su madre usó el título de conde de Teba. Casó en 1792 con María Ignacia Idiáquez, hija del duque de Granada de Ega.
Fue Teniente General de los Reales Ejércitos, Gobernador y Capitán General del Reino y Costas de Granada. Eugenio Eulalio Palafox y Portocarrero, conocido por uno de los muchos títulos que poseía, el de Conde de Montijo, era un destacado militar que apoyo en todo momento a Fernando VII, sin abandonar su pertenencia a la masonería.
En el libro de Juan Carlos Molano : MASONES Y REPUBLICANOS EN MONTIJO (1808-1936), en la pág. 13, se dice:

“A la entrada de los franceses en España tomó partido por ellos. Su odio a Godoy, desde la condena de su madre, le lleva a tomar parte activa en el motín de Aranjuez (1) por lo que fue arrestado.”
La muerte de su madre le dejó heredero del condado de Montijo, cediendo el de Teba a su hermano menor Cipriano. Después se mantuvo en contacto con los insurrectos de Andalucía y Aragón.
Entró a formar parte de la logia “Beneficencia del Josefina” y se convierte, por su influencia y actividad, en Gran Maestre del Gran Oriente Español hasta 1820, pero no está probado. (2)
Posteriormente, Eugenio Eulalio, toma parte en una trama con otros participantes para el asesinato del rey Fernando VII, para tratar de implantar el régimen liberal, pero sería detenido.”
El conde de Montijo claramente posicionado entre los afrancesados y claro aliado de José Bonaparte con consigue influir para que Montijo no sufriera las consecuencias de los desastres de la guerra en el periodo de 1808 a 1812.
En 1820 triunfaría el movimiento constitucionalista de Riego, que era masón. La masonería obligó al Conde de Montijo a renunciar a su cargo que sería sustituido por Riego.
Eugenio Eulalio murió en 1834, sin sucesión, y su hermano Cipriano, que también era afrancesado y masón, heredaría el condado. (3)

 (1)      El motín de Aranjuez fue una revuelta de carácter popular, respaldada por el Príncipe de Asturias, Fernando VII, entre el 17 y el 19 de marzo del año 1808, provocada por la difícil situación que atravesaba España como consecuencia de las guerras europeas y crisis del absolutismo, y dirigida principalmente contra el que entonces era auténtico dueño de la situación política española, Manuel Godoy.
       (2)      María Francisca Portocarrero y Zúñiga, VI Condesa de Montijo fue una famosa ilustrada en Madrid, progresista y comprometida, jansenista heterodoxa, muy conocida en los círculos intelectuales. Por sus ideas jansenistas, perdió el apoyo de Godoy, le acusó la Inquisición, fue desterrada a Logroño y Montijo, donde permaneció en 1805 y 1806.
      (3)     Respecto a sus actividades masónicas en la Gran Logia Nacional de España o Gran Oriente de España, un masón contemporáneo, Antonio Alcalá Galiano, comenta en sus Memorias que “En 1817 la cabeza de la sociedad masónica no estaba en Madrid, sino en Granada; donde era capitán general el conde de Montijo... (el cual) estableció allí la sociedad secreta, que se difundió por toda la monarquía siendo el general cabeza de la sociedad inmediato presidente... Se multiplicaron las sociedades, hubo una en Madrid. No podía faltar una en Cádiz, pues, me tocó hacer un mediano papel en ella” (A. Alcalá Galiano, Recuerdos de un anciano, I). Precisamente, entre los altos dignatarios de la Orden estaba Bartolomé Gallardo, secretario de Montijo en 1808. Sin embargo, en 1818, las persecuciones contra los masones motivaron que en “Granada hubiera desaparecido la autoridad superior de un cuerpo tan temible. El conde de Montijo ya no mandaba allí y, o cansado del oficio de conspirador, no obstante tenerle suma afición, o temeroso, vivía sin ser molestado” (A. Alcalá Galiano, Recuerdos de un anciano, I).
En 1820 le encontramos formando parte de la logia madrileña Los Amigos reunidos de la Virtud Triunfante en compañía de su hermano Cipriano Palafox y el zaragozano marqués de Ariño. Dicha logia decidió abandonar la politizada Gran Logia Nacional de España y pidió su “regularización” al Grande Oriente de Francia. 
       (4)     Cipriano Palafox Portocarrero, VIII Conde de Montijo.


Fuentes:
-          Vicente Navarro del Castillo: MONTIJO. APUNTES HISTÓRICOS DE UNA VILLA CONDAL
-          Juan Carlos Molano Gragera: MASONES Y REPUBLICANOS EN MONTIJO (1808-1936)
-          Conde de MONTIJO (1773-1834) – UNED

-          Historia de la masonería en España. UNED.



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