FR. DOMINGO DE S.
FRANCISCO
Lego franciscano descalzo, era natural de Casillas (Ávila).
En su juventud fue mozo de labranza de Jerez de los Caballeros y después de
Montijo. Tomó los hábitos en el Convento de S. Isidro de Loriana (1) , el 4 de octubre de 1675, en donde
permanecí toda su vida.
Según nos dice el presbítero Vicente Navarro del Castillo en
su libro (1), que “estuvo tan unido a Montijo, que lo podemos considerar como
hijo adoptivo de la población”. Con frecuencia acudía a Montijo a solicitar
limosnas para su convento y los vecinos “le tenían en gran estima por los
ejemplos de santidad que diera”.
Cuenta el cronista que en una ocasión por creer que había
hablado una inconveniencia, se presentó en la misa mayor, con un palo en la
boca y así recorrió las calles del pueblo durante todo el día. En otra, el
vecino de Torremayor Juan doblado lo encontró atado por el cuello a la aldaba
de la puerta de la iglesia de este pueblo, diciendo a los transeúnte que era
una bestia que no podía dominar los instintos carnales de su pobre cuerpo.
Murió en Torremayor el dia 1 de enero de 1707 y los vecinos
de Montijos acudieron en multitud a por su cuerpo para ser enterrado en
Montijo, cosa que permitieron los frailes de Loriana, por el gran amor que el
difunto y el pueblo se profesaban mutuamente.
Pagó el entierro el sacerdote d. Gonzalo Barrena y fue
sepultado en la iglesia parroquial, en la tarima de la santísima trinidad, el
dia 2. Al sepelio acudieron autoridades, sacerdotes y pueblo en masa. (2)
Notas:
(1) San Isidro de Loriana: Situado en las estribaciones de la
Sierra de San Pedro, a orillas del arroyo Lorianilla. Se puede acceder a él
desde la carretera de la Nava de Santiago a La Roca de la Sierra, entrando por
la finca «La Muela» y de aquí a la fincas «El carnero» y «El Vidrio», donde se
encuentra el monasterio. La fundación debió hacerse sobre una antigua iglesia
dedicada a San Isidro de
Loriana. Este lugar fue elegido por fray Alonso del Manzanete, originario de La
Roca de la Sierra (entonces llamada Aldea del Manzanete), bajo el patronazgo
del señor de Loriana D. Juan de Velázquez y Ávila, inaugurándose en el año
1551. Fue un enclave de relevancia, ya que se celebraron en él dos definitorios
provinciales en 1557 y 1559., siendo elegido como comisario provincial el
propio San Pedro de Alcántara.
(2) San Antonio, Fr. Martín de: Crónica de la provincia de S. Gabriel. II parte.
Fuente:
Vicente Navarro del Castillo: MONTIJO. APUNTES HISTÓRICOS
DE UNA VILLA CONDAL.
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