DÁMASO ESTÉVEZ LÓPEZ
Músico polivalente
Dámaso Estévez López
nace en Montijo el 10 de septiembre de 1955, hijo de Vicente de la Fe y Javiera
López Barril. Tiene una hermana Ana y un hermano Daniel Ángel.
Contrae matrimonio con
Carmen Calero Flores, tendrá familia numerosa cuatro hijas Carmen, Livia,
Jéssica, Libertad y un hijo Dámaso.
Con tan sólo dos años
fue a la escuela de Eulalia Gómez, que luego profesó de monja de clausura.
Hasta los siete años asiste a las escuelas nacionales de párvulos. Con 8 años
pasa a una escuela privada, regentada por Julián Guzmán, el cual hacía hincapié
en las materias de Lengua y Matemáticas básicas, lo que se llamaba entonces
saber leer, escribir y las cuatro reglas (sumar, restar, multiplicar y
dividir). También impartía las materias de Geografía e Historia Española y
Religión.
Ya por esta época se le
podía ver entusiasmado con todo lo relacionado a la música. Sin duda en él hay
una evidente influencia familiar que de alguna manera despierta desde muy
pequeño la afición por este bonito arte. Le gustaba escuchar a su abuela materna,
Ana Barril, que tocaba la guitarra flamenca, y a su tío Manolo Estévez, que
tocaba el bombardino, que fue músico en la Banda de Montijo cuando la dirigió
don Andrés Mena. Otro familiar que será quizás el antecedente más profesional e
intenso será el de Francisco Barril Cortés, primo de su madre, músico montijano
que hizo patria fuera de Montijo.
Dámaso a
los 12 años estudió algunos meses solfeo con el maestro Antonio Rico, tuba de
la Banda de Montijo.
Se presentó con diez
años al examen de Ingreso sacando una nota de 8, que le facultó para una pequeña
beca, con la que comenzó a estudiar el Bachillerato por libre (por aquellos
entonces no había todavía instituto en Montijo) y por las tardes, tres maestros
nacionales, D. Fidel Córdoba, D. Luis Alarcó y D. Pedro Fuentes, les preparaban
por libre de todas las materias. Los exámenes de 1º fueron en Mérida,
aprobándolos todos sin problemas.
En diciembre de 1.967
se inaugura el Instituto Vegas Bajas en Montijo. Al principio era una sección
delegada de Mérida, para unos años después tener autonomía propia. En esas
aulas nuevas, con pupitres para dos y calefacción, completó el Bach. Elemental
y la Reválida, con profesores que aún viven y que recuerda con mucho cariño,
como Dª María Arrobas, Dª Adelaida Rodríguez y D. José Cutanda. Fue una novedad
auténtica para todos los de su generación, pasar de tener un maestro para todas
las materias a tener uno para cada asignatura. Años inolvidables de amigos y
amigas, primeros amores y cómo no, de la música, siempre presente en su vida.
Durante esa
época, en las vacaciones de verano aprovechaba para trabajar en un taller
mecánico, donde su padre era el maestro jefe de taller. Ejercía trabajos de
cobros de facturas por la calle, ayudaba al despacho de recambios etc.
Con algunos compañeros de Instituto
comienza a tocar temas de los 70, con una batería artesanal que se fabrica con
diversos materiales. Autodidacta total, se cuela en las bodas del pueblo para
ver tocar a las orquestas y empaparse de los baterías de aquella época,
(Carlín, Los Coloraos, El Cacharrero...).
Terminó el Bachiller Superior,
sin revalidar. Al no querer seguir estudiando, (cosa de la que luego se
arrepintió) se fue ya de fijo a trabajar a los Talleres Dámaso Estévez, de
Montijo, donde siguió ejerciendo de cobrador, recadero, y dependiente de recambios,
además de comenzar sus pinitos con la contabilidad, descubriendo que era lo que
realmente le gustaba, a parte de la música.
A los 18 años se
incorporó al servicio militar, como voluntario, con la idea de quedarse en el
Ejército como músico, ya que su madre tenía un primo hermano, Francisco
Barril Cortés, que era Subteniente Músico
y le animó a ello. Pero a Dámaso aunque le gustaba la música no le tiraba la
carrera militar y decidió trasladarse a Badajoz.
Pero las cosas no
marcharon como esperaba y cuando cumplió
su tiempo, se licenció. Fue una etapa también interesante por la gente que
conoció y las muchas experiencias por las que pasó.
Por aquella época ya
tenía novia, pues se conocieron a los 16 años. El noviazgo con Carmen Calero
culminó en boda en el año 1.978 y hasta hoy siguen compartiendo sus vidas, con
unos hijos a los que han procurado educar en la tolerancia, la solidaridad el
respeto y también en la lucha por sus derechos, inculcándoles valores
importantes para desenvolverse en la vida.
Terminado el servicio
militar, regresó al Taller donde había trabajado antes, pero sus expectativas
eran otras y en el año 1.976 encontró trabajo de administrativo en Martinete
S.A., empresa conservera del tomate, en la cual sigue después de 40 años como
Jefe de Administración y Financiero, esperando pronto su merecida jubilación.
En el año 1.979 se
compra su primera batería y entra a formar parte, en plan profesional, de la orquesta “Los Rebeldes”, donde adquiere
experiencia y soltura tocando por toda la geografía extremeña y de Portugal.
Disuelta esta orquesta, se une al montijano Luis Núñez (Luichi) y fundan varias
agrupaciones, tocando y grabando su primer disco “Curiosa Gente” con José María
Matas (entonces cantautor) en los estudios Bola de Sevilla en el año 1.982.
Entra a formar parte de los músicos que acompañaron al grupo “Pueblo”, grupo
folk de Pueblo Nuevo del Guadiana, con el que estuvieron en Madrid, Leganés,
Jerez, Zaragoza y toda Extremadura. Acompaña al cantautor Fermín, en varias
actuaciones.
En los años 90 fue
co-fundador del grupo de rock “Elektra”, con el que graban “El árbol del olvido”
con temas de Luichi y uno suyo: “Desengánchate colega”. Con este grupo giran
por dos años y luego se deshace, por motivos de trabajo de sus componentes.
En 1990, con el fin de
sacarse una espinita que tenía desde hacía años, se matriculó en el Instituto
ESINE de Madrid por correspondencia. En el año 1.992 acabó sus estudios
sacándose la Diplomatura en Derecho Tributario y Asesoría Fiscal, asimilable y
convalidable a la carrera de Empresariales que le faculta a ejercer como tal en
el territorio español y de la CEE.
Junto con otros músicos, funda la Orquesta
Armonía, para amenizar bailes en varios salones de la localidad y al mismo
tiempo funda junto con Joaquín Jiménez “Kini” y Pepe Varela, el trío de Jazz
“Kini Fussion” y se adentra en el mundo del Jazz y la fusión, grabando dos
maquetas en directo, una en Sala Caracol y otra en Onda Cero Radio Montijo. Con
esta agrupación dan diversos conciertos por Extremadura y Portugal.
Acompaña al cantante
José Antonio Moreno Delgado “Urco” y a la cantante de jazz y soul Lourdes
Garrido. Colabora en la grabación del disco de la Coral de Montijo, “Concierto
Encanto”, compaginando con actuaciones de la “Monty Jazz”, colaboraciones con
diversas agrupaciones en
actuaciones benéficas e
impartiendo clases de batería a nivel particular.
Actualmente, sigue
formando parte de la Monty Jazz, y de la Banda de Música de Montijo, donde ha perfeccionado sus estudios de Solfeo y
trombón de varas con el profesor Narciso M. Leo, Director de la misma. Es
batería y percusionista de la “Toma Jazz Big Band” de Montijo, agrupación
creada dentro de la Asociación Musical Andrés Mena de Montijo. Además es
batería del grupo de flamenco- fusión, “Los del Cerro”.
Dámaso siempre fue una
persona comprometida e implicada con todo aquello que demandaba su cooperación
y su participación. Pendiente de su familia y de la educación de sus hijos colaboró
siempre con los centros educativos y con el profesorado de forma ejemplar.
De la misma manera
aporta su tiempo y su dedicación para servir a la sociedad y así de 1.979 a
1.983 fue concejal de Cultura y Festejos del Ayuntamiento de Montijo y
Secretario de Administración de la Agrupación local del PSOE. También ejerció de
corresponsal del periódico regional Extremadura durante 5 años.
Dámaso Estévez López
sin duda alguna es una persona querida por todos cuantos tienen la suerte de
conocerle, una gran persona, y con una serie de cualidades que destaca de forma
muy significativa en todos aquellos ámbitos donde se ha implicado.Un placer y un honor contar con este personaje en nuestro blog.
Le deseamos lo mejor y
muchos años dando todo eso que lleva dentro junto a su gran arte como músico y
como persona.
Fuente:
Texto e imágenes: facilitados por un familiar
Muchas gracias por la publicación, D.Manuel. Para los Estévez Calero es todo un honor tener a un padre así, volcado con la familia y con el pueblo montijano. Eso sí, siempre ligado a la música, su pasión. Pasión que nos ha transmitido a mis hermanas y a mí desde que éramos pequeños.
ResponderEliminarGracias a vosotros. Tu padre es buena gente, puedes estar orgulloso. Un abrazo
ResponderEliminar